En las calurosas noches de verano, encontrar paz, tranquilidad y confort puede ser todo un reto. Si sientes demasiado calor para dormir por la noche, hay varias cosas que puedes hacer para refrescarte.
1. Consigue un edredón de verano
A algunas personas les cuesta dormirse sólo con una sábana. Un edredón fresco de verano está diseñado para ayudarte a dormir cómodamente cuando hace calor: Transporta el calor y la humedad fuera del cuerpo para que te despiertes descansado.
2. Utiliza la ropa de cama adecuada
La ropa de cama de lino es ideal para los calurosos meses de verano. Este tipo de tejido absorbe la humedad rápidamente y vuelve a liberarla. Este efecto mantiene la ropa de cama seca y fresca y puede ayudarle a conseguir un sueño reparador incluso en las calurosas noches de verano. La ropa de cama fabricada con fibras de lino también es muy duradera. No suelta pelusa, por lo que podrá disfrutar de un entorno de descanso más saludable.
3. Hazte con un colchón refrigerante
Si aún no tienes un sobrecolchón, este verano puede ser el momento de adquirir uno, no sólo porque puede proteger y prolongar la vida útil de su colchón, sino también porque puede conseguir uno con cualidades refrescantes. El látex le dará la sensación de estar tumbado encima del colchón superior en lugar de hundirse en él, y eso significa que el calor se libera más fácilmente.
4. Utiliza un protector de colchón y un protector de almohada
Si tiendes a sudar por la noche, es una buena idea utilizar un protector de colchón. Prolonga la vida de tu colchón o sobrecolchón al protegerlo de la humedad.
Un protector de almohada protege la almohada no sólo del sudor, sino también de los productos de peluquería, la crema de noche, etc. De esta forma también ayuda a reforzar la durabilidad de su almohada.
5. Duerme en la posición correcta para mantenerte fresco por la noche
Cuanta menos parte del cuerpo toque el colchón, mejor. Por eso puede ser útil dormir de lado. Dormir en posición de estrella de mar también puede ayudarle a ventilar y mantenerse fresco
6. Encontrar el pijama adecuado
Elige un pijama de un material que absorba la humedad, como el bambú, o algo ligero, como el algodón. Puede que tengas la tentación de dormir al natural, pero ten en cuenta que el pijama absorberá al menos parte de la humedad, y protegerá así tu ropa de cama y tus sábanas.
7. Mantén una bebida y un paño húmedo junto a la cama
Mantén una botella de agua junto a la cama, pero no bebas demasiado si no quieres despertarte en mitad de la noche para ir al baño. También puedes refrescarte con un paño húmedo contra la cara.
8. Evita la luz del sol en tu dormitorio
Asegúrate de que durante el día no te dé la luz del sol con cortinas opacas, persianas enrollables opacas o persianas verticales opacas. Lo ideal es que la temperatura del dormitorio sea más baja que la del salón, preferiblemente entre 18 y 19 grados. Las cortinas opacas evitarán que los rayos del sol calienten la habitación.
9. Las cenas copiosas y las bebidas pueden hacerte entrar en calor
La comida picante puede hacerte sudar, así que mantente alejado de la pimienta de cayena y los jalapeños durante el último par de horas antes de acostarte.
Evita también el alcohol y el café 2-3 horas antes de ir a la cama.